lunes, 17 de octubre de 2011

Declaración de la Conferencia de Paz de San Sebastián (17 de octubre 2011)



Texto íntegro de la declaración acordada por la Conferencia de Paz de San Sebastián, leída a su término por el exprimer ministro irlandés Bertie Ahern:


"Hemos venido al País Vasco porque creemos que ha llegado la hora y la posibilidad de finalizar la ultima confrontación armada en Europa. Creemos que este objetivo puede ser alcanzado ahora con el apoyo de toda la ciudadanía, de sus representantes políticos y con el de Europa y de la comunidad internacional. 
   
Queremos aclarar que no hemos venido aquí hoy para imponer algo o pretender que tenemos el derecho o la autoridad de dictar a la ciudadanía de este país, a sus diversos actores y a sus representantes políticos, qué se debe hacer. En cambio, hemos venido con buena fe y con la esperanza de poder ofrecer ideas desde nuestra propia experiencia resolviendo largos conflictos que afligieron a nuestras propias sociedades y pueblos, así como de otros que ayudamos a resolver.

Sabemos por nuestra propia experiencia que terminar con una situación de violencia y conflicto y lograr una paz duradera nunca es fácil, se requiere valentía, voluntad de tomar riesgos, compromisos profundos y generosidad y visión de hombre de Estado. 

La paz viene cuando el poder de la reconciliación pesa más que los hábitos del odio, cuando la posibilidad del presente y del futuro es infinitamente mejor que la amargura del pasado. 

Sabemos también de nuestra propia experiencia que cuando hay una verdadera oportunidad para alcanzar la paz debe ser aprovechada. La creciente exigencia de la ciudadanía de este país y sus representantes políticos para superar el conflicto mediante el diálogo, la democracia y la completa no violencia ha creado esta oportunidad.  

En base a esto, pensamos que es posible terminar hoy con más de 50 años de violencia y alcanzar una paz justa y duradera. A la vista de esto quisiéramos establecer los siguientes cinco puntos: 

   1. Llamamos a ETA a hacer una declaración pública de cese definitivo de la actividad armada y solicitar dialogo con los Gobiernos de España y Francia para tratar exclusivamente las consecuencias del conflicto. 

   2. Si dicha declaración fuese realizada instamos a los Gobiernos de España y Francia a darle la bienvenida y a aceptar iniciar conversaciones para tratar exclusivamente las consecuencias del conflicto. 

   3. Instamos a que se adopten pasos profundos para avanzar en la reconciliación, reconocer, compensar y asistir a todas las víctimas, reconocer el dolor causado y ayudar a sanar las heridas personales y sociales. 

   4. En nuestra experiencia de resolver conflictos hay a menudo otras cuestiones que sin son tratadas pueden ayudar a tratar de alcanzar una paz duradera. Sugerimos que los actores no violentos y representantes políticos se reúnan y discutan cuestiones políticas, así como otras relacionadas con el respeto, con consulta a la ciudadanía, lo cual podría contribuir a nueva era sin conflicto. En nuestra experiencia, las terceras partes observadoras o facilitadoras ayudan al diálogo. Aquí el diálogo también podría ser asistido por facilitadores internacionales si así fuese decidido por las partes involucradas. 

   5. Estamos dispuestos a organizar un comité de seguimiento de estas recomendaciones.