jueves, 5 de julio de 2007

Aimé Césaire: La Belleza

La Amante

-¿Qué es la belleza sino ese peso completo de amenazas que fascina y seduce a la impotencia el batir desarmado de un párpado?

El Rebelde

-¿Qué es la belleza sino el cartel lacerado de una sonrisa sobre la puerta abatida de un rostro? ¿Qué es morir sino la faz pedregosa del descubrimiento, el viaje feura de la semana y del color en el revés del sol?

El Rebelde

-Mi corte, un montón de osamentas; mi trono, carnes podridas; mi corona, un círculo de excrementos.

... es inútil que pinten de blanco el pie del árbol, la fuerza de la corteza desde abajo grita...

El Rebelde
-No soy un corazón árido. No soy un corazón sin piedad.
Soy un hombre de buena sed que circula alrededor de charcas envenenadas.


Mi apellido: Ofendido; mi nombre: Humillado; mi estado: Sublevado; mi edad: La Edad de Piedra.


Aimé Cesaire

2 comentarios:

Concha Pelayo/ AICA (de la Asociación Internacional de Críticos de Arte) dijo...

Me dejas hecha una pieza con estos textos. En verdad te digo que no hay mejor coraza que otra coraza. Para que todo nos resbale.

Invitas a pensar. Créelo.

Me hubiera gustado saludarte. Si te acordaste de mi y no dijiste nada, mal. Otro día, por favor, llámame (650405250) y hablamos de lo divino y humano.

Que la pereza y -otra vez- el escepticismo, no te impidan publicar lo que, intuyo, tienes escrito. Si tienes amigos editores, miel sobre hojuelas.

Un saludo.

Concha Pelayo/ AICA (de la Asociación Internacional de Críticos de Arte) dijo...

Talin: He aquí una buena reflexión sobre el caso Mateos:
http://www.lluisdezamora.blogspot.com/